miércoles, 30 de diciembre de 2009

Herramientas para el Impresor


Herramientas útiles en el desarrollo del trabajo de impresor offset. Supongo que cualquier taller cuenta con ellas, pero hay tanta variedad de empresas que en muchas apenas se usarán y en otras serán herramientas normales.


Si cualquier operario de maquinaria offset ha recibido un curso de Calidad específico de artes gráficas o de Implantación de ISO 12647-2:2010 debería de estar familiarizado. En principio, si no se emplean, se tiende a creer que son innecesarias y superfluas. Nada más lejos de la realidad. Son elementos que hacen más fácil nuestro trabajo y tienden a generar un entorno homogéneo en las artes gráficas allí donde existían muchos elementos de carácter dispar. La rutina y las normas crean calidad y una forma predecible de trabajar.

espada higrométrica
El higrómetro debería de ser omnipresente en los talleres de impresión. Un entorno propicio para trabajar con el papel, debería de encontrarse entre el 50-55% de humedad relativa y 20 o 22 ºC . Cualquier cifra por encima o por debajo o, peor, variaciones bruscas, puede hacer que la jornada con una tirada larga llegue a ser un infierno. El papel es altamente higroscópico: una esponja, vaya. Con más de 35 º C en el recinto, aparte de que sudas como un buey y bebes mucha agua, la tinta se vuelve inestable y la película de mojado sobre la plancha de impresión tiene un comportamiento, en el mejor de los casos, errática debido a la fuerte evaporación, exigiendo niveles altos de alcohol isopropílico en el agua para estabilizar el proceso. A muchas  imprentas le dan completamente igual las condiciones ambientales, aduciendo problemas económicos para evitar aclimataciones, pero si sumasen la cantidad de horas perdidas al cabo del año por problemas con el papel, estoy seguro de que se replantearían el tema. Como siempre, falta formación, entre los trabajadores y, como no, los cuadros directivos que no ven más allá del coste/hora y el corto plazo del negocio.

La Espada Higrométrica o termo-higrómetro de espada. Herramienta excepcional para comprobar los palés de papel y detectar la humedad y la temperatura de las pilas. Lleva una especie de espada que se desliza enmedio del papel.Si hay más de un 10% de diferencia en la humedad relativa con respecto al taller y la temperatura es diferente en exceso, puedes echarte a temblar.

durómetro
El durómetro para comprobar rodillos y cauchos. La dureza viene en grados Shore tipo A.  La manera óptima de hacer un mantenimiento de rodillos es evaluar diámetro y dureza cuando se montan nuevos y más tarde de forma periódica volver a medir estos parámetros. Deberíamos consultar el manual del fabricante o atender las recomendaciones de los técnicos respecto a la dureza de la goma adecuada en los rodillos, rechazando del fabricante tolerancias mayores  en +/- 5º shore a estos parámetros. Atención al cepillado de la goma, que sea uniforme.  Generalmente, la goma se va endureciendo y pierde diámetro por desgaste; es una cristalización debido a la fricción, la cal del agua, residuos de la tinta  y los diferentes productos químicos diluidos en el agua de mojado; un sistema de ósmosis en el circuito de mojado es muy recomendable para contar siempre con agua libre de residuos.  Si la máquina ha sido modificada para usar offset seco con planchas semiplanas, es necesario evaluar las características de la goma más a menudo debido a la alta temperatura que alcanza la batería de entintado y una mayor degradación de los compuestos de la goma. Una diferencia de diez o más grados shore sobre la medición original tras un uso intensivo en el tiempo de la máquina nos indicaría  que hay que pensar en mandar a rectificar esos rodillos.
Batería de entintado: rodillos blandos suelen ser entre 30-60 grados shore, entre 60 y 80 shore los duros. Las mantillas se consideran blandas entre 70-74 shore, medias entre 74 y 76 shore y duras entre 76-82 grados shore. Las mantillas comprensibles suelen estar en el último grupo. Tintas UV y offset seco, waterless, exigen rodillos y mantillas  de caucho especial. Recomendable consultar con los técnicos de la máquina y los fabricantes de las tintas.
Un juego de alzas normalizadas para cambiar los cauchos sin tener que estar midiendo. Cada color tiene un grosor determinado. Repites colores, cambias mantilla y listo. Ahí van las medidas:


0,05: blanca
0,10: crema
0,125: canela
0,15: marrón
0,175: rosa
0,20: verde
0,25 : naranja
0,30 : amarilla
0,40 : azul

Una llave dinamométrica, con una presión determinada por el fabricante de la máquina impresora,  para apretar los cauchos al cambiarlos. Así siempre llevarán la misma presión. Así evitamos que compañeros con diferente tacto reemplacen las mantillas de diferente forma. Es una forma más de normalizar  mantenimientos normales.
Hay más, pero creo que con estas medidas básicas se puede empezar a volver predecible la respuesta de nuestra máquina, que es el resultado final que buscamos,  rutinas que generan ahorros de tiempo y aumento de la calidad final.

Se aproxima el final del año. Tenemos 2010 a la vuelta de la esquina y todos esperamos que la crisis vaya remitiendo.

Un saludo.

martes, 22 de diciembre de 2009

Generar PDF desde Freehand 11

Uno de los programas más veteranos en el mundo del diseño vectorial es Freehand. Hace tiempo que Adobe compró el software y lo llevó a una vía muerta, potenciando el Illustrator como única opción comercial potente del mercado.

No obstante, existen muchos operarios de imprenta que siguen trabajando con este programa, más que nada debido o a una crónica falta de inversión del directivo o mando intermedio en software nuevo y tiempo de formación. En general, el empresario medio en este país no entiende nada de diseño o maquetación por ordenador y se queda en la "barrera" mirando el panorama como si las cosas no evolucionasen . Realiza un gasto fuerte una vez y cree que es como las máquinas de imprimir, que hay que mantenerlas un tiempo determinado. Pues sí, las cosas avanzan, se desarrollan y el software es uno de los elementos que más cambios se llevan de año en año.

Bien. Pero hay un problema cuando quieres generar PDF de calidad desde Freehand. En principio, muchos maquetadores trazan los textos para crear estos PDF, ya que Freehand no incrusta las fuentes en el documento nuevo, pero aún haciéndolo así, que es válido, Freehand no soporta PDF/x-3, bueno, ni siquiera PDF/X-1a, que es el estándar de facto del mundo editorial y de imprenta.

Pues bien, un truco muy válido es instalar Adobe Pro en el sistema. Este programa genera una impresora virtual de PDF: Adobe PDF. Cuando necesitemos generar el PDF desde Freehand, lo mandamos a esta impresora virtual que dispone de múltiples opciones de generación de archivos y soporta PDF/X-3 y PDF/X-4 2008. Puedes moficar el archivo a tu gusto, resolución, colores, perfiles de color ICC etc. Es una muy buena opción para crear PDF de calidad desde algo ya obsoleto, aunque yo aconsejo realizar la inversión de adquirir Illustrator o arriesgar algo y pasarse al software libre, con Inkscape y Scribus, que son opciones también muy válidas y, a estas alturas, superiores a Freehand.

Un saludo.




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jueves, 17 de diciembre de 2009

Dibujo propio


Este vez subo uno de mis dibujos, ejecutado en Photoshop a "mano alzada" con tableta Wacom, sin capas ni máscaras rápidas, aunque, evidentemente, con algunos filtros artísticos...

Al que se pregunte qué representa, puede pensar en la Torre del Ángel Verde, un edificio emblemático de una serie de libros de fantasía épica: Añoranzas y Pesares. Muy buenos, por cierto. Recomiendo su lectura. Ahora estoy con Juego de Tronos y también promete.
Saludos.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Papel Ácido

Soy un admirador del formato digital para la distribución de contenidos escritos, ya sean libros o revistas. Hasta ahora, el problema consistía en encontrar los soportes adecuados para una lectura óptima, lo que realmente se podía considerar un problema. Las pantallas CRT, TFT o LCD eran, son, una tortura para la vista. Eso ya está solucionado, primero con los lectores eBook y más adelante, con el ePaper, que será el verdadero competidor del papel impreso convencional.


Una de las quejas de los lectores tradicionales es que almacenar libros es un verdadero placer. Poder manosearlos, ojearlos y tocar los volúmenes. Comprar libros, abrirlos y oler la tinta y el papel impreso nuevos. Bueno, estoy de acuerdo. Es una de las razones por las cuales escogí trabajar en la industria Gráfica. Siempre ejerció cierta fascinación sobre mí. Mi biblioteca es considerable. Sin embargo, una tarjeta SD es tan volátil, tan etérea... ¿o no? Pero, ¿alguien que haya adquirido ediciones de bolsillo hace diez o quince o veinte años a vuelto a abrir esos libros? Se están autodestruyendo. Las páginas amarillean, se secan y se vuelven quebradizas. En poco más de veinte años, todos esos libros elaborados con papel offset del económico ya no existirán. ¿En qué lugar queda el eBook? Nuestro patrimonio se convierte en polvo mientras que  dos click de ratón podemos volcar nuestros ePub, PDF o Doc en los discos duros del PC (que probablemente también acaben rotos u obsoletos). Es probable que el papel couché se salve del desastre, pero, ¿tendrá buena calidad  o será un  couché máquina con un cepillado rápido para obtener brillo y colas ácidas? Éste también acabará deshecho. Solo el exterior alcalino de un buen papel couché de tres o cuatro cepillados se salvará y, señores, en este mundo tan competitivo hace tiempo que dejé de ver ese papel  excelente porque eso encarece el producto final.

Es un problema mundial. Nuestro patrimonio escrito se deshace ante nuestros ojos. ¿La razón?: el papel ácido.

A mediados del siglo XIX la demanda mundial de producto impreso y el avance tecnológico de la imprenta y el huecograbado generaron una creciente industria papelera. Se investigó un sistema de producción de papel barato y eficaz que atendiese esta voraz demanda. La pulpa de la madera se convirtió en papel blanco mediante complejos procesos químicos y mecánicos que le otorgaban blancura y estabilidad. La colofonía, un derivado de resina que se usa para el encolado de las fibras y la estabilidad del pliego, el dióxido de cloro, el hidrosulfuro, el ozono y muchos más elementos para blanquear. Todos ellos con un PH bastante bajo. El resultado es un papel excesivamente ácido, muy usado hasta los años 80 del pasado siglo y que aún hoy se usa con profusión, sobre todo en entornos donde el precio prima sobre otros parámetros y el destino no es que perdure. Ésta acidez reacciona con el oxígeno del aire, degradando la celulosa mediante oxidación, aunque también se da, a menudo a la vez, la hidrólisis ácida, acelerada por un exceso de humedad. Con un peligro tan evidente se llegó a la conclusión de que eran necesarios impresos en papel libre de ácido. La norma ISO 9706, papel sin ácido y sin lignina, regula este sistema de producción. Poco a poco se va extendiendo. Se puede decir que hoy en día, ya contamos con una gama amplia de papeles acid free con suficiente reserva alcalina como para durar dos o tres siglos con un almacenamiento estándar.

El problema son los productos impresos que sufren ahora este problema. Hoy en día, muchas e importante bibliotecas en el mundo acometen costosos sistemas para salvar sus volúmenes y volver neutro el PH del papel. Se puede considerar un negocio al alza el salvamento de ingentes cantidades de documentos de mayor o menor importancia. Incluso la Biblioteca del Congreso de Washington estimaba que el 98 % de sus 15 millones de libros se encontraban en peligro debido al papel ácido y era necesario un proceso de alcalinización.


Por lo tanto, ya sabemos más sobre el problema del papel ácido y sobre sus consecuencias. De todos esos libros que atesoramos, pocos tendrán un futuro halagüeño. Afortunadamente,  todos esos volúmenes cuyas hojas amarillean y se vuelven quebradizas en nuestras baldas pueden ser salvados. Últimamente, he visto productos bastante eficaces que por un módico precio puede salvar nuestros documentos. La primera medida sería disponer de un rotulador de rojo de clorofenol con el cual comprobar si nuestro documento sufre el problema de acidez. Si es así, existen sistemas rápidos para aumentar la alcalinidad en formatos spray.

La tecnología para salvar nuestro legado está ahí, usemosla para salvar nuestra información.

Un saludo.